
Se espera su
pronta incorporación al Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del
Estado (SNASPE) que administra CONAF, debido a su categoría de sitio
prioritario para la biodiversidad.
La Corporación Nacional
Forestal (CONAF), junto a las secretarias regionales ministeriales de
Agricultura, Bienes Nacionales y Medio Ambiente de las regiones de Tarapacá y
Antofagasta, trabajan mancomunadamente por dar categoría de protección a la
desembocadura del río Loa, sitio catalogado como prioritario para la
biodiversidad biológica birregional y reconocido por ser el asentamiento de
aves migratorias.
Esta semana las autoridades
de las entidades involucradas, se reunieron en Antofagasta con la finalidad de
avanzar en la propuesta de creación de la nueva área protegida Desembocadura
del río Loa, futura área silvestre protegida que se proyecta abarque territorios
de las comunas de Tocopilla e Iquique.
Cabe mencionar que esta
propuesta forma parte de las 8 nuevas áreas silvestres protegidas que se espera
incorporar al Sistema Nacional de Áreas Silvestres Protegidas del Estado
(SNASPE), que administra CONAF, durante el gobierno del presidente Sebastián
Piñera.
La desembocadura río Loa responde a la existencia de un territorio que dispone
relevantes atributos naturales, físicos, biológicos y arqueológicos, además de
un potencial turístico que requiere ser puesto bajo protección para asegurar la
conservación de la biodiversidad.
Juan Ignacio Boudon, explica que la creación de esta nueva área protegida “permitiría
por un lado, atender la Estrategia Regional de Biodiversidad, y por otro,
integrar a diferentes actores del territorio en los procesos de planificación
territorial y manejo del área, con el objeto de potenciar la conservación in
situ y, en la medida que sea compatible, el desarrollo turístico sustentable con
estándares de calidad”.
La incorporación de este sitio
contribuirá a mejorar la representatividad de los ambientes naturales del
SNASPE, además de establecer planes participativos de protección y conservación
con énfasis en la flora y fauna con problemas de conservación, el desarrollo de
líneas de investigación y monitoreo, detener procesos de deterioro ambiental,
realizar fiscalizaciones en el área y, finalmente, potenciar el turismo de
intereses especiales en la zona.