Más de mil quinientos victorianos llegaron desde Iquique, Calama, Antofagasta, Pozo Almonte, Coquimbo y otras ciudades a participar de las actividades de conmemoración de los 30 años del cierre de la ex oficina salitrera Victoria, la última en la región de Tarapacá que estaba funcionando.
Las actividades comenzaron a partir de las 8 de la mañana, cuando los buses trasladaron a los antiguos ocupantes de la salitrera desde la iglesia pampina, en Iquique, hasta el cementerio del ex centro calichero, donde se efectuó un responso para todos quienes yacen en el camposanto y que tuvieron un paso por la Oficina Victoria, oficiado por el sacerdote que acompañó hasta el final de sus días al poblado, padre Juan María Tramblay.
En el lugar, el alcalde de Pozo Almonte, Augusto Smith Marín, agradeció la masiva concurrencia, pues “sabemos que muchos viajaron de distintos lados para estar acá recordando parte de lo que fue su pasado. Incluso yo tengo muy buenos recuerdos, porque llegué a trabajar a Victoria después de salir de la Universidad”.
Tras esto, una peregrinación con la Virgen de Lourdes partió desde el sacro lugar, hasta donde se encontraba antiguamente la iglesia del poblado, donde se encuentra una gruta que –desde ahora- aloja a la sacra imagen, donada por la familia del concejal de Iquique, Iván Pérez, quien expresó “lo feliz que estoy en este momento, ya que como todos los que vinieron, yo soy victoriano; y no hay nada que me haga más feliz que ver como la gente se reúne en esta conmemoración del cierre de las faenas, pues el desalojo se produjo el 17 de enero de 1980. También agradezco a los bailes que nacieron acá y que vinieron hoy, en esta importante fecha”.
De esta manera, el padre Tramblay bendijo la imagen de la Virgen de Lourdes y los conjuntos religiosos de los Morenos de Victoria y la Diablada de Victoria, danzaron y cantaron en la gruta que la acoge.
Del recuerdo
Así, todos los asistentes se trasladaron al antiguo Odeón, lugar en el cual el edil de Pozo Almonte se volvió a dirigir a los presentes. “Acá venimos todos por una misma razón, conmemorar los 30 años del cierre y quiero, nuevamente, agradecer la asistencia que han tenido y recordar junto a ustedes esos buenos momentos”. Con lo que después se descubrió una placa conmemoratoria que daba cuenta de este evento.
Hugo Barraza Jofré, presidente de la sociedad cultural Salitrera Victoria, también se manifestó sobre esta conmemoración, agradeciendo a todos los que hicieron que los 30 años se realizaran de una manera ágil y tranquila, “en especial al personal municipal de Pozo Almonte, que año a año a colaborado para que nos reunamos todos los pampinos de Victoria y que nos ayudan siempre en el tema logístico”.
Después de las palabras de ambos, un grupo de música animó la jornada, con el himno a Victoria, que los más de mil participantes cantaron a viva voz, para, tras la actividad, ocupar el lugar con canciones del recuerdo.
Consiguiente con esto, hubo la instalación de carteles que recordaban el lugar específico en donde los otrora habitantes de la ex oficina salitrera vivían. Guillermo Milla, uno de los victorianos, recorrió el destruido pueblo, buscando entre los escombros cuál era su casa, poniendo junto a su mujer el letrero. “Acá tenemos muchos recuerdos, muchas cosas que contar. Nacimos, crecimos, nos casamos y tuvimos a nuestro primer hijo acá en la pampa. Son tantas cosas que uno recuerda con estar acá, que es inimaginable para alguien externo”, expresó.