La entrega de casas para damnificados por el terremoto de 2010 en la Villa Galvarino, en la ciudad de Los Ángeles, sirvió de escenario para que el Presidente Sebastián Piñera criticara a quienes llaman a jornadas de paralización en el país.
"Me parece una paradoja que mientras tantos chilenos nos esforzamos y trabajamos desde muy temprano hasta muy tarde para construir un país mejor, para levantar Chile, haya otros que hagan justamente lo contrario y que también se esfuerzan, pero para destruir Chile, para causar dolor, sufrimiento, incendiar escuelas, atentar contra carabineros y otros ciudadanos", afirmó el Jefe de Estado tras recordar a los 21 pasajeros que fallecieron en el accidente del Avión CASA 212 en el archipiélago de Juan Fernández, entre ellos el líder de la Fundación Desafío Levantemos Chile, Felipe Cubillos, que dedicó el último año de su vida a colaborar con la reconstrucción del país.
En esta línea, aseveró que "definitivamente no es el Chile que queremos ni merecemos".
Las palabras del jefe de Estado se producen en la misma jornada en que el movimiento estudiantil marchó desde la Usach hasta el Parque Almagro para expresar sus demandas. En la jornada además anunciaron que se analizará llamar a un paro nacional para el 22 de septiembre.
Al movimiento estudiantil se suman los trabajadores de la salud municipalizada que este miércoles cumplieron la segunda jornada de su paro de 48 horas.
