Hasta la Facultad de Educación de la Universidad de Concepción llegaron este sábado dirigentes de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), con el fin de evaluar el proceso de movilizaciones por la enseñanza desarrolladas este 2011, ocasión en la que realizaron una autocrítica de lo que ha sido el movimiento estudiantil.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la USACH, Camilo Ballesteros afirmó que el principal mea culpa de los estudiantes fue la escasa capacidad para realizar proyecciones a largo plazo.
Ballesteros agregó que también lamentaron la "poca relación con otros actores sociales, como los secundarios o los trabajadores".
El dirigente estudiantil agregó que el próximo año la participación de los estudiantes se centrará en la Superintendencia de Educación Superior y la Ley de Acreditación 2.0, que será anunciada por el gobierno en 2012.
Por otro lado, anunciaron nuevas movilizaciones para el 22 de diciembre y el 7 de enero.
