
Actualmente, ciertas profesiones pueden actuar como Inspector Técnico de
Obras (ITO) ante un proyecto. Los beneficios de esta nueva ley son muchos, pero
nada iguala la seguridad que una empresa con inspectores profesionales, como
PRIGAN, trae al momento de construir obras públicas y privadas.
Un Inspector Técnico de Obras
(ITO) es el encargado de supervisar la calidad, plazo y costos de cada proyecto
de construcción. En 2013, se publicó la Ley 20.703, la que modificó las
normales legales, con el fin de garantizar construcciones de calidad y acelerar
los procesos ante las direcciones de obras municipales. Esta normativa define
las responsabilidades de cada profesional que forma parte de la obra, y
sanciona cualquier incumplimiento por parte de ellos en el producto final.
Asimismo, establece que arquitectos, ingenieros civiles, ingenieros
constructores o constructores civiles pueden actuar como ITO, donde la
penalidad por incumplimiento puede ir desde amonestaciones hasta su eliminación
del Registro de Inspectores Técnicos.
No obstante, esta ley ha
recibido críticas al hacer que el ITO sea subsidiariamente responsable con el
constructor por los daños y prejuicios producidos por fallas o defectos en la
obra derivados del incumplimiento de estas funciones. Con ello, han surgido
inconvenientes como incertidumbre en la delimitación de responsabilidades,
aumento de costos o imposibilidad de ITOs independientes de contar con el
patrimonio para financiar sus faltas.
Es por esto que el trabajo
profesional de empresas como PRIGAN es fundamental para garantizar buenos
resultados. La empresa ha trabajado como ITO en varias construcciones públicas,
con diversos proyectos en la Universidad de Chile, el Polideportivo del campus
Juan Gómez Milla o la Comisaría de la Ligua, por mencionar algunos. “Para
PRIGAN es fundamental que la labor del equipo de inspección logre anticiparse a
ciertos hitos de la obra, evitando alteraciones en la calidad, costo y plazo
fijados para el proyecto. Para esto trabajamos junto al cliente y contratistas,
colaborando en soluciones técnicas, que permitan su óptimo desarrollo”, señaló
Nicole Cooper, Gerente Comercial de PRIGAN.
La labor de un buen ITO se ve
reflejada en el cumplimiento de los procesos y protocolos del Sistema de
Gestión de Calidad, caracterizando a sus profesionales con habilidades de
liderazgo, colaboración y autonomía. PRIGAN lleva más de 2.5 millones de m2
inspeccionados, con 40 obras del sector industrial y retail; 63 obras del
ámbito habitacional y oficinas; 88 obras del sector de salud, clínicas, centros
médicos, laboratorios y hospitales; y 83 instalaciones del rubro educacional,
entre otros.
La experiencia es necesaria al
apoyar a un cliente desde los inicios del proyecto, contando con un equipo
gerencial en las áreas de Operaciones, Proyecto, Administración y Supervisión
de Contratos. Distintas especialidades deben coordinarse, y es aquí cuando los
profesionales expertos de la inspección técnica de PRIGAN logra un conocimiento
más acabado de los proyectos, conociendo sus detalles y comprendiendo cada
decisión involucrada en la obra.