Rodrigo Pino, quien denunció abusos sexuales en su contra
cometidos presuntamente por el obispo de Iquique Marco Órdenes, dijo que
este miércoles recibió una respuesta positiva del Vaticano sobre este caso.
En entrevista concedida a CNN Chile,
el hombre de 30 años dijo que “es una respuesta positiva que no es
nada contra mí y que nos alegró”, sin ahondar sobre qué tipo de noticia era la
que había recibido.
Pino volvió a reiterar su versión de
los presuntos abusos que habría sufrido por tres años a partir de
1997, afirmando que antes de ello había ya sufrido abusos de parte de otros dos
sacerdotes.
Entre los detalles que entregó sobre
los supuestos abusos de Órdenes afirmó que “el obispo es muy inteligente,
muy culto. Se acercó tanto a mi familia le abrí las puertas de la casa de mis
padres”.
Relató que se iba a dormir a la
rectoría de La Tirana. “Por atrás de la pieza suya había un pasillo por el cual
entraba a la pieza donde estaba y al principio fueron tocaciones, besos y
después la parte sexual”.
“Yo he dicho que a los 17 años me pude
haber enamorado de él, lo defendía siempre. Mis amistades de la iglesia me
decían que él se acercaba a mí, me hacía participar y fue un plus
para seguir entrando en mi vida”, expresó.
También Pino recordó que a los
26 años un joven le relató que también había sido víctima de abusos del
obispo de Iquique. Tras ello aseguró que se juntó en el año 2009 con
Órdenes donde le grabó la conversación que habrían tenido.
“Estoy contento con la resolución de El Vaticano: es verdad lo que me
pasó (…) hay una grabación en que dice que lo que hizo conmigo fue por
amor y experimentó el cariño y que con el otro joven, éste se le tiró al
dulce a él y lo hizo por un tema carnal”.
Relató que la grabación la guardó y que “nunca la mostré a
la Fiscalía por miedo y porque me sentía culpable. Se la mostré en abril de
este año a la Nunciatura y hay un documento con notario que
acredita que efectivamente es la voz de monseñor Órdenes”, aseveró.