Segunda versión
del índice muestra una caída en la actitud innovadora y emprendedora en Chile.
La aversión al riesgo, la falta de acceso a recursos y oportunidades educacionales serían causales de esta menor predisposición a innovar y emprender.
La versión 2024 del Índice Actitud Innovadora y Emprendedora, realizado por ForoInnovación, Feedback Research y Procorp, muestra una disminución de 1,9 puntos porcentuales en relación a la medición del año anterior (de 63,7 a 61,8). Así, lo que esta disminución, estadísticamente significativa, evidencia una menor predisposición de los encuestados a innovar y emprender.
No obstante, se mantiene la diferencia que ya había sido observada en 2023 entre los tres principales componentes que conforman el estudio, cognitivo, valórico y relacional. Así, el componente cognitivo y valórico muestran una disminución significativa, en tanto que el componente relacional experimenta un aumento significativo, pero sigue siendo el que presenta los valores más bajos.
Son varios los factores que podrían explicar esta disminución, explicó el presidente de ForoInnovación, Guillermo Carey. “Uno de ellos, relacionado con el bajo valor del índice en la dimensión de experimentación, es la fuerte aversión al riesgo que estaría mostrando la sociedad chilena. El miedo al fracaso y la falta de acceso a recursos financieros y formación especializada reducen las posibilidades de experimentar, manteniendo una actitud conservadora. Asimismo, en cuanto a la confianza en los otros, lo que está dado por el componente relacional, se siguen observando valores críticos en todas sus dimensiones, siendo la dimensión de colaboración la más baja de todas” detalló.
Por otra parte, el Índice revela percepciones diferentes sobre la situación actual de la innovación y el emprendimiento en el país, destacando tanto las tendencias positivas como las áreas de preocupación, especialmente en términos de brechas de género y desigualdades socioeconómicas.
El socio director de diseño estratégico de ProCorp, Roberto Concha, afirmó que estas diferencias también se expresan en las autopercepciones de las personas. "Quienes se perciben como más innovadores tienden a tener un índice de innovación más alto, lo que destaca la importancia de la autopercepción para fomentar comportamientos innovadores. Esto no solo refleja las capacidades de una persona, sino que también puede ser un motor importante para la acción innovadora. Fomentar una autopercepción positiva en este aspecto puede ser una estrategia clave para impulsar la innovación y el emprendimiento”, agregó.
El estudio detalla la existencia de una disparidad significativa entre hombres y mujeres en cuanto a la propensión a emprender y la actitud hacia la innovación. Así, las mujeres son menos propensas a asumir riesgos y tienen una mayor disposición al cambio en comparación con los hombres. Los hombres tienen un índice de propensión al riesgo de 70.4, mientras que el de las mujeres es de 69.9
En cuanto a la disposición al cambio, el índice es de 62.8 para los hombres y de 65.1 para las mujeres. Este fenómeno se refleja también en la diferencia de participación en el ecosistema de innovación, donde los hombres representan un 65% de los emprendedores, mientras que las mujeres solo un 35%.
El análisis por segmento socioeconómico muestra una notable diferencia en la actitud hacia la innovación y el emprendimiento. Las personas de nivel socioeconómico alto tienen una mayor probabilidad de emprender y muestran una actitud más favorable hacia la innovación en comparación con las de niveles socioeconómicos medio y bajo. Los índices de propensión al riesgo son de 69.5 para el nivel socioeconómico alto, 71.0 para el medio y 69.5 para el bajo. La disposición al cambio es de 65.1 para el nivel socioeconómico alto, 64.1 para el medio y 63.0 para el bajo. Estas cifras indicarían que las personas de niveles socioeconómicos más altos a pesar de que poseen un índice de propensión al riesgo similar a los niveles socioeconómicos bajos, al tener mayor disposición al cambio tienen mayores oportunidades y recursos para innovar y emprender, lo que en cierta medida amplía la brecha.
El socio y director coordinador de Feedback Research, Juan Pardo, sostuvo que "los niveles socioeconómicos y educativos más altos muestran una mayor propensión hacia la innovación y el emprendimiento, lo cual subraya la necesidad de garantizar igualdad de acceso a recursos y oportunidades para todas las personas. En especial en materias de educación, sobre todo en edades más tempranas".
De esta forma, el Índice de Innovación y Emprendimiento 2024 subraya la necesidad de que el país cuente con políticas públicas y más programas que promuevan la igualdad de género y reduzcan las desigualdades socioeconómicas. Así como también fomentar y apoyar los emprendimientos en los sectores medios y bajos, construyendo así un ecosistema de innovación más inclusivo y equitativo.
Esta segunda encuesta da continuidad al Índice de Actitud Innovadora y Emprendedora realizado por primera vez en 2023, con la colaboración de más de 72 organizaciones, y contó con la participación de más de 8.200 encuestados, todos mayores de edad, residentes en Chile a lo largo del país, incluyendo a personas pertenecientes al ecosistema de innovación, el sector público, centros de formación técnica, universidades y a la opinión pública, en general.