En salitrera
Humberstone, exalumnas, vieron emocionadas cómo se recuperó la escuelita
pampina, en sus fachadas, luciendo igual que hace 150 años.
Un
concierto sinfónico en el histórico teatro de Humberstone, presentado por la
Orquesta Juvenil e Infantil de Iquique; y la inauguración de dos emblemáticas
obras en la Escuela Coeducacional N° 35 de esa Salitrera y de la Planta de
Lixiviación de Santa Laura, dieron el contexto para celebrar los 50 años de la
Convención de Patrimonio Mundial, Cultural y Natural de la UNESCO.
La
larga jornada que se verificó este viernes 25 de noviembre, reunió a
autoridades locales y nacionales, equipos técnicos que participaron en la
ejecución de las obras, además de numerosos pampinos y pampinas, que,
emocionados, vieron como su anhelo de preservar su patrimonio, continúa siendo
una realidad y a la vez, un desafío permanente.
El
anfitrión de la jornada fue Sergio Bitar Chacra, en su calidad de presidente
del Directorio de la Corporación Museo del Salitre, (CMS) que administra el
Sitio Patrimonio Mundial, compuesto por las oficinas Humberstone y Santa Laura.
“Vamos a dejar una gran herencia para el turismo, la cultura, la historia, con
el movimiento social y político en el norte y su aporte a Chile… estamos orgullosos”, señaló.
Bitar
hizo un recuento desde el inicio de la CMS que nace a instancia de los propios
pampinos que se resistían a permitir que la historia del salitre y su propia
historia plasmada en la cultura pampina, desapareciera; hasta grandes obras,
como el Museo del Salitre en Humberstone, lograr que la UNESCO retirara al
Sitio de la lista de Patrimonio en Peligro, hasta ahora.
Después
de una aparente inactividad, -porque las obras se siguieron desarrollando-, se
logra cambiar la cubierta de la Planta de Lixiviación, única en el mundo,
dotándola de mayor seguridad y durabilidad. Asimismo, la reposición de las
fachadas y ventanas de la Escuela N° 35, que posee un alto valor para la
comunidad pampina y los visitantes.
“Un
pueblo, un país y los jóvenes que no saben del esfuerzo que los antecedieron
para llegar a tener lo que tienen, no tiene raíz y por lo tanto, no tiene
futuro. La historia está muy vinculada al futuro, por lo tanto, todo lo que
podamos pensar en lo que queremos que sea Chile en los próximos 20 o 30 años,
tiene que ver con que nuestros jóvenes conozcan la historia”, remarcó el ex
senador por Tarapacá.
En
la inauguración de las obras en la antigua escuelita pampina, intervino Claudia Prado, Coordinadora del Centro
Nacional de Sitios de Patrimonio Mundial. Las obras permitirán mantener vigente la escuela, “sabiendo que es
uno de los sitios más visitados de Humberstone y más significativo, tanto para
los pampinos que lo visitan regularmente, como para las nuevas generaciones”,
señaló.
De
hecho, varias exalumnas de la Escuela 35, participaron de la ceremonia. Es el
caso de la Presidenta del Centro de Exalumnas, María Rojas, quien señaló que
hace 28 años se formó este grupo “para renovar el compromiso con nuestra
escuela. Nos pusimos uniforme y desfilamos. Y acá estamos ahora con mucha
emoción”.
Luego
de esta inauguración, los festejos continuaron en el teatro de la Salitrera,
ocasión en que Alejandra Szczepaniak, coordinadora de cultura para la UNESCO,
en Chile, agradeció la invitación para “celebrar los 50 años de la
Convención para la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural,
también conocida como la Convención de 1972. Este instrumento normativo,
ratificado por el Estado chileno en 1980, nos invita a “adoptar una política
general encaminada a atribuir al patrimonio cultural y natural una función en
la vida colectiva y a integrar la protección de ese patrimonio en los programas
de planificación general”.
Una
de las formas de celebración fue el concierto sinfónico de la Orquesta Juvenil,
que surgen en el país, bajo el alero de FOJI, Fundación de Orquesta Juveniles e Infantiles. El director Ejecutivo
de la entidad, Miguel Farías, destacó que “a través de nuestra labor fomentamos
la práctica orquestal, no solo el aprender a tocar un instrumento, sino que
hacer comunidad a través de la música”.
Planta
de Lixiviación
Al
cierre de la larga jornada, cuando ya caía la noche en la pampa, y en Santa
Laura se sentía el viento y el ruido característico que produce al hacer sonar
las calaminas, se inauguran las obras en la Planta de Lixiviación; y, en medio
de la oscuridad, fue iluminada, luciendo majestuosa, como testimonio de lo que
fue esa época de esplendor industrial salitrero.
Priscila
Barahona, arquitecta de la subdirección de Fomento y Gestión Patrimonial del
Servicio del Patrimonio Cultural, señaló que era muy importante ser parte de
ese momento, que es la conclusión de valorar el patrimonio, “hasta que se
logran obras como ésta; obras que son el esfuerzo de muchas instituciones, de
muchas intensiones y personas que están interesadas en mantener este patrimonio
para las nuevas generaciones”.