La Cámara de Diputados de Chile aprobó este martes por una amplia mayoría el segundo retiro del 10% de lo acumulado en los fondos privados de pensiones, tres meses después de la aprobación de un primer retiro.
Tal como se planteó la primera vez, esta segunda iniciativa busca ir en ayuda de las familias que han sufrido los efectos económicos de la pandemia de coronavirus, que en Chile superó los 500.000 contagios y los 14.000 fallecidos confirmados desde la primera infección detectada el 3 de marzo.
El proyecto salió adelante con 130 votos a favor, 18 en contra y dos abstenciones. Fue presentado por parlamentarios opositores y para su aprobación fue necesario el apoyo de un gran número de parlamentarios de la coalición del gobierno del conservador Sebastián Piñera, que se ha opuesto a todos los retiros.
Debe ser ahora tramitado en el Senado, donde la oposición tiene una leve mayoría pero necesita también de los votos de parlamentarios oficialistas para su aprobación.
"El Congreso de Chile le ha entregado una inmensa noticia al país, al aprobar un segundo retiro", celebró el diputado opositor Matías Walker.
De acuerdo a los parlamentarios que presentaron el proyecto, la iniciativa se hizo necesaria al agotarse las ayudas estatales planteadas por el gobierno para que las familias más pobres puedan hacer frente a la crisis económica derivada de la pandemia. El último de los bonos entregados culmina en diciembre.
El gobierno se opone a la medida, debido a las consecuencias futuras sobre las ya bajas pensiones de los trabajadores chilenos, obligados a afiliarse a las privadas Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), creadas en 1981 por la dictadura de Augusto Pinochet y que considera la capitalización absolutamente individual.
Según cálculos del gobierno, con este nuevo retiro cerca de 4,2 millones de afiliados a las AFP -un tercio del total- quedarían con sus cuentas de ahorro previsional en cero.
El primer retiro fue solicitado por casi 10 de las 11 millones de personas que estaban habilitadas para hacerlo, con el retiro total de unos 18.000 millones de dólares, de acuerdo a Datos de la Superintendencia de Pensiones.
En caso de convertirse en ley, esta segunda iniciativa se realizará bajo las mismas condiciones que se hizo la primera: permitirá un retiro máximo de 4,3 millones de pesos y un mínimo de un millón de pesos de sus fondos de pensión.
Los diputados aprobaron además este martes por unanimidad una reforma constitucional para permitir el retiro total de los fondos ahorrados para enfermos terminales.
Fuente: AFP