La directora
regional de Tarapacá del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin),
María Fernanda Martínez, presentó este viernes una querella contra quienes
resulten responsables del robo de los equipos instalados en las dos estaciones
sismológicas del volcán Irruputuncu, en la comuna de Pica, Región de Tarapacá.
El robo provocó que
el mencionado macizo quedara fuera de la red de monitoreo del Observatorio
Volcanológico de Los Andes del Sur (OVDAS), que realiza seguimiento a la
situación de los 43 complejos volcánicos activos en el país.
El equipamiento,
robado el 10 de septiembre pasado, está avaluado en más de 12 millones de pesos
y debía permanecer allí por las próximas dos décadas, que es la estimación de
la vida útil de esta tecnología. Las estaciones del Irruputuncu quedaron sólo
con un sismógrafo, la estructura y las cajas de protección violadas, pero sin
cables, radios, baterías ni paneles de energía solar.
El libelo fue
presentado en el Juzgado de Garantía de Pozo al Monte, ocasión en que la
directora regional de Sernageomin, María Fernanda Martínez, comentó que
"esta acción tiene por finalidad procurar que se investigue quienes
podrían estar detrás de la sustracción de los equipos robados, ya que es
llamativo que se roben equipos técnicos cuyo fin específico es monitorear la
actividad volcánica en la zona por lo que su uso es limitado a dicha actividad,
pero se trata de un equipamiento de alto costo y que ha demandado una fuerte
inversión de recursos por parte del estado ".
El equipo sustraído
de las estaciones Irruputuncu y El Bloque, ubicados en terrenos del Sistema
Nacional de Áreas Silvestres Protegidas (Snaspe), corresponde principalmente al
sistema alimentador de energía y transmisión de datos, que es fundamental para
la recepción en línea de la señal. Las autoridades informaron que existen
seguros comprometidos.
Mientras se
resuelve la reposición de la tecnología extraída, el Sernageomin va a
monitorear indirectamente a través de las estaciones del volcán Olca, situadas
a 26 kilómetros del volcán Irruputuncu, aunque no se puede realizar un estudio
detallado, sí es posible detectar señales sísmicas por encima de una magnitud
igual a 1grado Richter, lo que permite tener conocimiento si existiera una
reactivación importante.
Entre 2009 y 2013
también se registraron robos en las estaciones sismológicas de los volcanes
Chaitén, Llaima, Copahue, Láscar y Callaqui. El Sernageomin ha señalado que el
costo de aumentar las medidas antirrobos es cercano a los 500 millones de
pesos, porque se trata de 190 estaciones de monitoreo en todo el país, más los
nodos satelitales que sirven al propósito de transmitir la información.
El Irruputuncu (del
quechua "Iru": de pequeño tamaño con puntas duras y agudas; y "Puyunku:
hondo) es un estratovolcán con una cumbre que está a 5165 m sobre el nivel del
mar. Está situado en el altiplano de la Región de Tarapacá, en la frontera
chileno-boliviana, a 180 kilómetros de Iquique. El Sernageomin lo ha
posicionado en el lugar número 20 en el ranking actualizado de riesgo de los
volcanes activos de Chile.
Fuente: UPI.com