El presidente Sebastián
Piñera, pidió perdón al país por sus errores, que redujeron su popularidad al
25 por ciento en la antesala de los comicios municipales de octubre y las
presidenciales de 2013.
“Sé que hemos cometido
errores y pido perdón por ello”, subrayó el mandatario al entregar su informe
al Congreso, en medio de carteles a favor y en contra de su gobierno en el
hemiciclo y la ausencia de dos senadores de oposición en protesta por el clima
político.
Sus palabras, con
llamados a la unidad y centradas en sus logros, fueron respondidas desde el
exterior por una marcha de miles de trabajadores y estudiantes por mejoras
sociales, en un país donde una de cada seis personas vive en la pobreza.
Clima de confrontación
“Hemos vivido un clima
de confrontación”, dijo Piñera en alusión a las miles de manifestaciones
realizadas contra su gestión desde 2011 que derrumbaron su apoyo ciudadano.
Piñera lamentó el golpe
que significó para su gestión el terremoto de febrero de 2010, el quinto más
grande en el mundo.
Piñera, tras dos
marchas de 80.000 estudiantes en la capital en las últimas semanas por
educación gratuita y de calidad, remarcó en su informe los esfuerzos por
ampliar becas y recursos en educación.
“Nunca antes en la
historia de nuestro país una generación tuvo tantas oportunidades como
ustedes”, dijo a los jóvenes.
Promesa cumplida
El mandatario, tras
opinar que Chile alcanzará el desarrollo en unos seis años, recordó que superar
la pobreza fue una de las promesas de su campaña, en un país donde uno de cada
seis chilenos vive en esa condición pese a que el país integra la OCDE.
“Los salarios están
creciendo a más de seis por ciento anual superando en más de dos por ciento la
inflación”, señaló, y recordó que el desempleo bajo del 7 al 6,6 por ciento.
Además, anunció un bono
especial por el alza de un diez por ciento de los alimentos, a distribuir en
1,5 millones de hogares de menores recursos. También destacó las iniciativas a
favor de la comunidad homosexual.
Protesta
Las palabras del
mandatario tuvieron repercusión en las
calles de Valparaíso, en inmediaciones del Congreso, donde miles de
trabajadores y estudiantes marcharon para reclamar mejoras sociales.
Esta manifestación fue
coronada por nuevos enfrentamientos entre Carabineros y grupos de manifestantes
que fueron reprimidos con gases y carros lanza aguas.