En la oportunidad se iluminó la Intendencia Regional
de color rosado para ampliar el mensaje de prevención.
“Fue
muy duro levantarme una mañana y darme cuenta que mi pelo se cayó por la
quimioterapia”, con esas palabras definió su historia de convivir y superar el
cáncer de mama, Ana María Cuneo.
Un
testimonio directo y profundo para las asistentes en el Salón Jorge Iturra de
la Intendencia Regional, donde se
realizó la ceremonia de concientización y que permitió conocer una alianza
entre Sernam y Teck Quebrada Blanca para favorecer a doscientas mujeres con un
examen gratuito de mamografía.
La
directora de Sernam, Natalia Currin, inició su intervención explicando que el
cáncer de mama es una enfermedad tratable si se detecta a tiempo. “La
importancia de hacerse una mamografía es vital para encontrar alguna anomalía
en el cuerpo y en especial si se
encuentra en el grupo de riesgo sobre los 35 años”.
En
ese sentido, Currin resaltó a Jeff Peet y Leonardo Fuentealba de Teck Quebrada
Blanca. “Cuando existen aliados como ellos
que demuestran una preocupación social con acciones concretas nada puede
salir mal. Por eso les comunico que tras una gestión nuestra hemos podido
conseguir 200 exámenes mamarios para ustedes y que ojalá que sepan aprovechar”.
El
Superintendente de Comunidades y Asuntos Externos de Teck Quebrada, Jeff Peet,
señaló que la motivación de la empresa es “colaborar siempre en que las mujeres
de Iquique, Alto Hospicio y del Interior estén bien cuidadas y resguardas.
Somos la segunda empresa en el país en tener
una gran dotación femenina y a eso apuntamos que cada día hayan muchas más”.
El
gobernador provincial de Iquique, Miguel Ángel Quezada, felicitó a Sernam y
Teck Quebrada Blanca por impulsar una iniciativa tan potente en el resguardo de
este mal. “Los hombres también debemos tomar conciencia porque el 2009
fallecieron más de 10 hombres por esta enfermedad y nadie está ajeno de
padecerlo”.
Testimonio
Uno
de los momentos más emotivos de la noche fue cuando Ana María Cunio, entregó su
testimonio de superación y valentía. “Mi
vida iba normal hasta que descubrí algo extraño en mi cuerpo y tras consultar a
los médicos me detectaron cáncer de mama. Asumo que nunca me hice controles
médicos pese a tener antecedentes familias
y por eso me arrepiento. Fue muy duro levantarme una mañana y darme
cuenta que mi pelo se cayó por la quimioterapia y aunque costó salir adelante gracias al apoyo
de mis familiares, hoy puedo decir con seguridad que superé este mal”.
El
cierre de la ceremonia se realizó en el frontis de la Intendencia Regional donde
autoridades junto a las certificadas posaron a los pies del recinto público
para iniciar la iluminación de color rosado.