
El
Gobierno de Chile reconoció que existe un importante desfase entre los 6.384
fallecidos por COVID-19 inscritos en el Registro Civil e informados este lunes
a la ciudadanía y los 7.057 decesos contabilizados en un reciente estudio por
el departamento estadístico del Ministerio de Salud.
"La
cifra que nosotros damos diariamente consiste en cruzar la información del
Registro Civil con la PCR positiva. El Departamento de Estadísticas e
Información de Salud (DEIS) toma en cuenta muchos otros elementos",
explicó el ministro de Salud, Enrique Paris.
El
DEIS informó el domingo que se han registrado 7.057 fallecidos confirmados con
PCR y 3.102 muertos "probables" que no cuentan con pruebas pero que
habrían fallecido con síntomas atribuibles a la COVID-19, con lo que entre
confirmados y sospechosos se llegaría a 10.159 decesos desde el inicio de la
pandemia.
Este
informe, divulgado una vez por semana y considerado el más exacto por los
expertos, sigue los criterios que recomienda la Organización Mundial de la
Salud (OMS) e incluye también información policial, hospitalaria y de
laboratorios.
"No
confundamos, no son 10.000 fallecidos, son 7.057 y reconocemos la diferencia.
La cifra del DEIS tiene mucho más aporte de datos, pero no son 10.000, insisto
en eso, los datos probables no están confirmados todavía", agregó el
ministro, quien aseguró que trabajarán para armonizar ambos informes.
Chile,
con 19 millones de habitantes, es uno de los países más afectados del mundo por
millón de habitantes, aunque Paris recalcó este lunes que la tendencia es
"optimista" y que la positividad sobre el número de exámenes se ha
reducido hasta el 19 %.
En
las últimas horas, se detectaron 3.025 nuevos casos, lo que eleva la cifra
total a 298.557 contagios, y se inscribieron 77 defunciones en el Registro Civil.
"Debemos
continuar con la estrategia de detectar, trazar y aislar en la mejor forma que
nos permita la diseminación del virus. Esta cifra de positividad PCR nos
alienta a seguir en esa línea", indicó Paris, quien descartó de momento
levantar alguna cuarentena.
La
zona metropolitana de Santiago, donde los casos han bajado considerablemente y
la red hospitalaria parece recuperarse tras semanas muy estresada, cumplirá el
viernes dos meses en cuarentena, aunque algunos barrios del centro de la ciudad
llevan encerrados desde marzo en uno de los confinamientos más largos del
mundo.
Las
regiones mineras de O'Higgins y Antofagasta son actualmente el principal foco
de la pandemia y la tasa de positividad de los exámenes se sitúa aún por encima
del 25 %, aunque las autoridades de momento descartan decretar la suspensión de
las operaciones mineras.
Fuente:
EFE