El alcalde de Alto Hospicio, Ramón Galleguillos, verificó en terreno los avances de las obras del estadio Juan Pablo Segundo y de la construcción de viviendas para 130 familias de El Boro y que formaron parte de un comité municipal.
En el recorrido donde estuvo presente el director de Secoplac, César Villanueva y los representantes de las empresas contratistas que desarrollan los trabajos, la autoridad comunal conoció en detalle los avances experimentados en las obras que tendrán un alto impacto para la comunidad.
En el caso de las obras de mejoramiento del estadio Juan Pablo Segundo, presentan un 80% de avance y estarán concluidas en agosto próximo. Estas consideran la habilitación de una moderna cancha de pasto sintético, torres de iluminación, mejoramiento de las graderías y de los cierres perimetrales de todo el recinto, considerando una inversión de $419 millones.
En cuanto, a la construcción de las viviendas del comité “Nueva Pampa”, ubicadas en el sector de El Boro, presentan un 98% de avance en las faenas y se estima que estarán concluidas a fines de este mes, considerando un presupuesto superior a los $1200 millones. Actualmente, se trabaja en la impermeabilización de las losas.
El proyecto consideró la construcción de 130 viviendas de material sólido, que poseen living-comedor, baño, cocina, patio y un área para la habilitación de dos dormitorios, en el primer piso. Además, cuentan con un muro medianero en el segundo piso, de tal forma que los beneficiarios implementen otras dependencias como ampliación de los inmuebles, para lo cual podrán acceder a subsidios estatales. Estarán dotadas de lavaderos, calefont, entre otros implementos que contribuirán a mejorar la calidad de vida de las familias.
La iniciativa también consideró una sede social, instalación de juegos infantiles, la instalación de un moderno sistema de iluminación de las calles y la construcción de los muros de contención a las viviendas que lo requerían.
Sobre los trabajos, Galleguillos dijo que son una demostración del alto nivel de gestión del municipio. “En ambos proyectos hemos contado con el aporte primordial del Gobierno, ya que la casa consistorial no posee recursos para ejecutar este tipo de obras. Estas iniciativas tendrán un alto impacto en la comunidad y, en el caso de las viviendas, beneficiarán a un universo importante de familias que residían pagando arriendos caros, hacinados o en inmuebles de familiares. Ahora tendrán su casa propia y sueños por construir en el futuro. La empresa constructora ha aplicado altos estándares de calidad y como municipio nos hemos preocupado que las viviendas estén bien levantadas, para que más tarde no existan reclamos de parte de los beneficiarios. Ese fue un compromiso que asumimos y hemos buscado que se cumpla a cabalidad”, dijo.
