
La instancia reunió a los ocho
candidatos participantes, con el exmandatario derechista Sebastián Piñera como
el favorito para ganar.
Economía,
educación y salud fueron los temas dominantes del último debate de
las elecciones presidenciales que se realizan en dos semanas en Chile, y
que reunió a los ocho candidatos participantes, con el exmandatario derechista
Sebastián Piñera como el favorito para ganar.
Los
ocho candidatos se presentaron a este último debate televisivo que
tuvo un formato de preguntas formuladas por un panel de periodistas y que no
dio pie a grandes confrontaciones entre los postulantes, y que fue seguido
masivamente por los chilenos que irán a las urnas para elegir un nuevo
presidente el domingo 19 de noviembre.
El
derechista Piñera, un exitoso empresario de 67 años, cuenta con cerca del 35%
del respaldo para ganar los comicios según encuestas preelectorales, pero que no
le alcanzaría para evitar un balotaje ante quien logre el segundo lugar.
En
sus intervenciones, Piñera afirmó que la economía chilena padece un
“estancamiento” y criticó el incremento del 20% del gasto público durante el
actual gobierno de la presidenta Michelle Bachelet, por lo cual anunció que
recortará un 2,5% de este gasto para financiar la mitad de su programa de
gobierno, que alcanza a los 14.000 millones de dólares.
“Vamos
a construir un país desarrollado, más libre, más justo y sustentable”, aseveró.
Por
su parte, el candidato oficialista, el senador Alejandro Guillier, segundo en
las preferencias electorales con 16,4%, pidió el voto de los chilenos para
garantizar “una sociedad más inclusiva” y el derecho “a la salud y a la
educación y una pensión decente”.
Guillier
se comprometió a mantener y profundizar la gratuidad en la educación superior
de la cual actualmente gozan 250.000 de los estudiantes más pobres del país,
gracias a una reforma realizada por la presidenta Bachelet.
La
periodista y representante del izquierdista Frente Amplio, Beatriz Sánchez, una
nueva cara de la política chilena con solo cinco meses de campaña, es tercera
en las encuestas con el 13,3% y afirmó que su candidatura “es la mejor para
enfrentar a Piñera” en una posible segunda vuelta.
También
participaron el cineasta Marco Enriquez Ominami del Partido Progresista, la
senadora Carolina Goic representante de la Democracia Cristina (DC) también
oficialista pero que prefirió levantar una candidatura propia.
Asimismo
estuvieron los candidatos Alejandro Navarro, senador socialista, el diputado
ultra conservador Juan Antonio Kast -férreo defensor de la obra de la dictadura
de Augusto Pinochet (1973-1990)- y el excomunista Eduardo Artes, casi un
desconocido hasta ahora en la política chilena.
Con
una fortuna personal de 2.700 millones de dólares, según la revista Forbes,
Piñera aspira a un segundo mandato tras un primer gobierno que debutó en 2010
con apoyo de los principales partidos de la derecha chilena.
Piñera
blanco de los ataques
Como
en anteriores debates, el expresidente Piñera se transformó en el blanco de los
ataques del resto de sus contendores, quienes lo acusaron de lanzar promesas
irrealizables, de financiamiento ilegal de su campaña en las elecciones del
2009 y de tener intereses económicos en paraísos fiscales.
“Miente,
miente que algo queda”, respondió Piñera a una de esas acusaciones.
En
tanto, Marco Enriquez Ominami se enfrentó con el oficialista Guillier a quien
acusó de estar inhabilitado para ser candidato porque en su campaña fue apoyado
por un alcalde de una comuna de Santiago investigado por presuntos vínculos con
el narcotráfico.
Pese
a ello, Enríquez Ominami afirmó que si Guillier llega a segunda vuelta, apoyará
su candidatura.
Casi
14 millones de chilenos están convocados para votar en las elecciones del 19 de
noviembre, las séptimas presidenciales desde el retorno a la democracia.
Fuente:
AFP