El que encabezó la sangrienta dictadura militar entre 1976 y 1983 ha fallecido a la edad de 87 años en Buenos Aires
El
ex dictador
argentino Jorge Rafael Videla, primer gobernante de la dictadura argentina
condenado a prisión perpetua por delitos de lesa humanidad, falleció hoy por
causas naturales en una cárcel de la provincia de Buenos Aires, a los 87 años. Nacido
el 2 de agosto de 1925 en la ciudad bonaerense de Mercedes, en el seno de una
familia con fuerte impronta política, comenzó su carrera militar en 1942.
Tras
licenciarse como oficial, ascendió en su carrera a la sombra del gobierno de la
presidenta María Estela Martínez de Perón, tercera esposa del tres veces
gobernante Juan Domingo Perón. En 1975 le nombró comandante en jefe del
Ejército. El 24 de marzo de 1976, junto a los oficiales Emilio Massera y
Orlando Agosti, lideró el golpe de Estado que derrocó a la presidenta y dio
paso a una cruenta dictadura de siete años.
Durante
sus cinco años de gestión, organizó el Mundial de Fútbol de 1978 y estuvo a
punto de declarar la guerra a Chile por un conflicto limítrofe que se superó
gracias a la mediación del Papa Juan Pablo II. Con el liberal José Alfredo
Martínez de Hoz como ministro de Economía, instrumentó una política basada en
la apertura de los mercados y la liberalización de la legislación laboral.
De
1976 a 1981 en Argentina se congelaron los salarios y se impuso una apertura
arancelaria que, en vez de incrementar la competitividad de la industria
nacional, acabó por destruirla. Con la economía en recesión, una creciente
inflación y la moneda devaluada, Videla fue sucedido al frente de la Junta por
el general Roberto Viola el 29 de marzo de 1981.
Tras
el restablecimiento de la democracia, fue detenido en 1984 y condenado a
reclusión perpetua al año siguiente. En 1990 fue beneficiado con un indulto
dictado por Carlos Menem y años después el juez español Baltasar Garzón le
incluyó en una nómina de militares y civiles argentinos cuya captura
internacional ordenó por crímenes cometidos durante la dictadura.
No
volvió a ser apresado hasta 1998 por orden de un magistrado bonaerense que
investigó la apropiación de hijos de víctimas de la represión ilegal.
Pocos días después de su detención, un tribunal aceptó que Videla, que entonces tenía 72 años, cumpliera prisión domiciliaria, beneficio que las leyes argentinas otorgan a los mayores de 70, hasta que a finales de 2008 fue trasladado a una cárcel militar.
Desde
entonces fue objeto de numerosos juicios por actuaciones durante su dictadura y
que, sentencia tras sentencia, le hallaron culpable por crímenes contra la
Humanidad. Videla fue el primer gobernante de la dictadura argentina
condenado a prisión perpetua, cuando en 2010 la Justicia le declaró culpable
del fusilamiento de una treintena de presos políticos en 1976.
Su
última condena se remonta a julio 2012 cuando fue condenado a 50 años de cárcel
por el robo de bebés dentro de un plan sistemático ejecutado por la
dictadura. Hace apenas unos días, el 6 de mayo, afrontó su último
procesamiento al ser procesado por crímenes de lesa humanidad en la provincia
de Rosario.
Fuente:
EFE