
La
inmunoterapia, que presenta distintas variantes, se ha consolidado como el
cuarto pilar terapéutico contra el cáncer y gana terreno en la lucha contra la mortal
enfermedad.
La
inmunoterapia biológica es específica para cada paciente y de menor costo que
su versión farmacológica -un cuarto de su valor-, pues usa células del propio
cuerpo.
La
información de avances científicos y nuevos tratamientos médicos entregan una
luz de esperanza a muchos pacientes alrededor del mundo y los tratamientos de inmunoterapia contra el cáncer son uno
de ellos. En Chile, según estimaciones de la Sociedad Chilena de Inmunoterapia de Células Dendríticas y Exosomas
(SOCHIDEX), se ha visto un aumento en la
cantidad de pacientes que acceden a tratamientos de este tipo en un 60% si se
compara la cantidad de pacientes que recibieron tratamiento en 2017 versus
2018. Sin embargo, el último tiempo también se ha visto un alza de lugares que
ofrecen protocolos de dudosa calidad, generando falsas expectativas en los
pacientes a un coste no menor. Es por ello que SOCHIDEX, en conjunto con Fundación Biogénica (que realiza
investigaciones de inmunoterapia contra el cáncer) y el Centro Clínico ReCell
(que aplica dichos procedimientos), han desarrollado una “guía para pacientes” (disponible
en la web de la sociedad), con el fin de entregar información certera a todos
quienes deseen conocer los beneficios de la inmunoterapia personalizada contra enfermedades
oncológicas. “La inmunoterapia resulta un gran complemento al tratamiento
oncológico convencional, siempre y cuando se realice en un centro
especializado, con profesionales calificados. Existen centros que ofrecen inmunoterapias
de baja biotecnología, con precios aparentemente convenientes, sin
profesionales, laboratorios o dedicación necesaria y que al final, crean falsas
expectativas pues no poseen mecanismos de real efectividad en el tratamiento
del cáncer. De hecho, un protocolo de 3era generación resulta 10 a 15
veces más efectivo que uno de 1era generación, y eso, es muy relevante
en cáncer", señala el Dr. Ramón Gutiérrez, patólogo especialista en
oncología molecular, Presidente de SOCHIDEX.
El tratamiento de inmunoterapia de 3era generación se
realiza mediante un proceso de inmuno-edición, que busca instalar, reparar o
potenciar aquellos mecanismos de inmuno-vigilancia que pudiesen estar dañados
para mejorar las expectativas de recuperación del paciente, en forma parcial
o total, a través de protocolos cada vez
más selectivos. Es decir, dirigidos contra células específicas del tumor,
evitando así dañar otros tejidos del cuerpo,
como el mismo sistema inmune inclusive, con lo cual se reducen
notablemente las molestias y complicaciones. Es un tratamiento cuyo 90% sucede en el laboratorio de
oncología molecular, muy distinto a pabellón, sala de quimio o radioterapia. Esta es una terapia biológica personalizada
que se hace a partir de células sanguíneas y moléculas tumorales (desde una
biopsia o muestra de una cirugía del propio paciente) que se procesan y
entrenan en laboratorio y posteriormente se reintegran al organismo de forma
ambulatoria, a través de una inyección. Consiste básicamente en fortalecer y
programar nuestras propias defensas y sistema inmunológico para que puedan
detectar y eliminar células cancerígenas”, explica el Dr. José Carlos Castillo,
Director
de ReCell, centro clínico chileno ubicado dentro de la categoría de los mejores
a nivel mundial en la realización de tratamientos de inmunoterapia de 3era
generación,y que exporta su
biotecnología a países de Europa y América.
¿En qué
fijarse antes de iniciar un tratamiento de inmunoterapia?
Equipo profesional: es prioritario contar
con patólogos, especialistas en oncología molecular, bioquímicos, tecnólogos y
equipo clínico, que aseguren que el paciente reciba un protocolo personalizado,
con parámetros celulares y moleculares muy precisos.
Biopsia: se debe pedir al paciente su
biopsia e incluso complementar con antígenos tumorales. Si esto no es
solicitado, debería generar dudas, puesto que es fundamental en un protocolo de
células dendríticas de 3a generación.
Dosis y tiempo necesario: un protocolo
validado de células dendríticas toma semanas para modificar la respuesta
inmune, ya sea de 4 dosis u otros más avanzados de 8 dosis (2 meses), que luego
requerirá refuerzos según la respuesta. Esta validación no la tienen vacunas
hechas en "24 horas" o que prometen rápidos efectos.
Resultados: conocer resultados de
pacientes y sus testimonios para evaluar la calidad de atención: Si bien es
cierto, el resultado final es variable en distintos pacientes, al igual que
ocurre con otros tratamientos biológicos tales como trasplantes o tratamientos
de fertilidad, los resultados obtenidos permiten conocer la capacidad de
respuesta que es posible alcanzar con el protocolo de cada centro.
Centros: prefiera centros vinculados a actividades
de investigación y evite aquellos ligados a procedimientos estéticos.
En distintos países de Europa y Asia los
tratamientos de inmunoterapia de 1era generación tienen un valor de inicio de
USD 14 mil en promedio llegando incluso por sobre los 90 mil dólares, mientras
que los de 3era generación parten en UDS 30 mil. Claramente, los costos económicos son altos,
pero en virtud del rol social de la Fundación Biogénica, hoy es posible en
Chile acceder a ellos con aranceles privilegiados y bonificados en hasta un 50%
del valor final. Es decir, se puede acceder a un completo protolo personalizado
desde los USD 15mil aproximadamente, lo cual resulta más
conveniente que tomar el tratamiento en el extranjero, donde el valor final, al
menos, se triplica, tal como lo han podido comprobar numerosos pacientes.