
En
un solo año, en Chile se registran miles de accidentes graves en el trabajo.
Esto no solo daña la salud de los trabajadores, sino que trae consigo
consecuencias en los plazos y en la calidad de la labor desempeñada.
El 40% de los
accidentes laborales en Chile son producto de golpes y caídas, siendo los meses
más críticos los de marzo, agosto y noviembre, según la Asociación Chilena de
Seguridad (ACHS). Aún más, la Región Metropolitana cuenta con el mayor número
de accidentes fatales en la industria de la construcción, cifras que demuestran
que la Seguridad y Salud es un tema esencial en el contexto actual.
En PRIGAN, empresa
líder en Gerenciamiento de Proyectos e Inspección Técnica de Obras, la seguridad
en la ejecución de una obra es fundamental para un desarrollo exitoso de un
proyecto de construcción. “Un criterio riguroso de los trabajadores entrega
tranquilidad al mandante de que el contratista consta de los más altos niveles
de calidad; los riesgos a la salud integral del trabajador disminuyen, lo que
significa que los plazos se optimizan; y los trabajadores protegen su propia
salud y su calificación”, explica Jorge Gallardo, Administrador de Contrato de
PRIGAN.
Para Jorge, el
principal desafío es crear una conciencia real en los trabajadores de lo fundamental
que es la seguridad y la prevención para ellos mismos. “Cuesta hacer entender
que la integridad física es importante, y que el hecho de ser rápidos no
garantiza el éxito de su trabajo”, agrega. Esto no es solo prioritario entre
los trabajadores, sino que además con los contratistas y los mandantes,
cumpliendo cabalmente con las normas vigentes.
Compañías como
PRIGAN buscan mantenerse actualizados a través de charlas periódicas,
capacitaciones, calificación de cuadrillas y subcontratos, e incluso concursos.
Sin embargo, un papel clave lo cumplen los ITOs. “Ellos son la cara visible y
el primer referente de supervisión del cumplimiento de todos los aspectos del
desarrollo del proyecto, incluyendo la seguridad de una obra”, aclara Gallardo.