jueves, 13 de febrero de 2020

Chile: Proceso constituyente es triunfo ciudadano


Pero corre peligros, alertó un académico doctor en Derecho.

"El proceso constituyente en Chile es un triunfo de la ciudadanía y, por tanto, corre siempre peligros", aseveró a ANSA el doctor en derecho de la Universidad de Chile, Claudio Nash.

El especialista en materias de derechos humanos fue el principal expositor en la conmemoración del Día de la Prensa que organizó el Círculo de Periodistas de Santiago en el Teatro Camilo Henríquez, ante quienes abordó "La libertad de expresión en el proceso constituyente".

"Hay un peligro cierto -precisó- de que aquellos sectores que no quieren que exista plebiscito logren de alguna forma imponer sus ideas por medio de la fuerza y termine evitándose el Plebiscito del día 26 de abril (aprueba o rechaza un nueva Constitución), y ese es un riesgo que no podemos descartar".

Añadió que "la única forma de lidiar con ello es a través de la participación y que la ciudadanía se apropie del Plebiscito y luego del proceso constituyente", entendiendo que "como todo triunfo va a haber que defenderlo de aquellos que no quieren que se materialice este cambio histórico para Chile".

Nash aseguró que "en momentos de crisis la prensa cumple un rol central", pero sostuvo que en el momento actual la apreciación que tiene es mixta.

Mencionó a las radios y medios digitales como actores centrales, en cambio la prensa escrita y la televisión "están claramente al debe" por cuanto "rápidamente se han ido cuadrando en torno a un discurso oficial que no da cuenta de lo que verdaderamente está sucediendo en Chile, y eso es muy peligroso para la democracia".

Ante la falta de liderazgos en el movimiento que protagonizó el estallido social del 18-O que ha sacado a más de un millón de personas a las calles, el académico reconoció que tiene particularidades "muy interesantes y estoy seguro que el proceso va a ser materia de estudio por muchos años en todo el mundo".

Consintió que una de las peculiaridades es que "es un proceso genuinamente espontáneo y autoconvocado de la ciudadanía, aquí no hay nadie que pueda arrogarse el liderazgo del proceso y eso lo hace también muy complejo".

Explicó que al no haber actores claramente definidos, "se hacen muy difíciles los procesos de negociación, sobre todo para el gobierno y el Parlamento.

Por lo tanto, lo que va a haber que acostumbrarse en Chile es a lidiar con procesos de esta naturaleza, mucho más horizontales donde vamos a tener que generar espacios de participación directa que hoy día no tenemos".

Esta realidad también es válida para los movimientos sociales, añadió, que ya no pueden entenderse en la lógica tradicional, con partidos políticos dirigiéndolos.

"Los movimientos sociales hoy día también tienen este carácter de horizontalidad, de autoconvocación, son procesos sociales mucho más porosos de lo que tradicionalmente estábamos acostumbrados a ver", afirmó.

Y esto último, prosiguió, tiene que ver con que en Chile en los últimos 30 años, con la post dictadura, fue desmantelado el movimiento social tradicional -sindicatos, colegios profesionales, centros de estudiantes- y eso no implicó desorganización sino formas distintas de organización y hoy día quienes desarticularon ese movimiento no tienen con quién dialogar y con quien lidiar.

"Están pagando su propia obra", dijo, en una implícita alusión a los gobiernos de centro izquierda que gobernaron a partir de 1990.

Consultado por las estimaciones de un marzo muy fuerte en movilizaciones, en especial el 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer, Nash respondió que "sin duda, un escenario de violencia a partir de marzo hasta el Plebiscito ayudaría mucho a aquellos sectores que no quieren que haya Plebiscito".

Por esto, concluyó, "lo que tenemos como desafío en Chile es un marzo donde se mantenga la movilización social -porque esta tiene que mantener- pero que sea pacífica y no darle espacio a la represión que de todas maneras va a intentar provocar y generar situaciones de violencia que nadie quiere".

Fuente: ANSA