En plena
fiesta, a los pequeños se les entregó un mensaje para que no se olvidaran de
Cristo en la festividad.
Una iglesia llena de globos de colores fue la que
recibió a los pequeños peregrinos y promesantes que asistieron a la Misa de los Niños, celebrada en el Santuario de La
Tirana, donde se les entregó un mensaje
para que no olvidaran a quienes los cuidan y que recen por ellos, como también
rezar por el Señor, para que los proteja.
La eucaristía fue efectuada por el rector del
Santuario, Franklin Luza, quien habló con los pequeños sobre la importancia que
tiene Jesucristo en nuestras vidas y cómo debe ser un ejemplo a seguir para
nuestras vidas, cuando ya crezcamos, por lo que siempre hay que tenerlo
presente.
El párroco manifestó en su homilía que “el Señor nos
enseña cómo hay que salir a anunciarlo.
Hay que salir sencillo, sin tantas cosas, con ropa sencilla y unas
sandalias para ir a los pueblos y contarles que Jesucristo es el Señor, con
humildad como Él lo hizo. Así en esta
fiesta estamos destacando la primacía de Él, pero no como los reyes de este
mundo, sino como un servidor de su pueblo”.
A la vez, el sacerdote se tomó un tiempo para hacer
que los más pequeños de la concurrencia subieran al altar y así efectuaran una
petición a Dios y a la “Chinita”, donde solicitaron que ellos cuidaran a sus
abuelos, padres, hermanos, integrantes de los bailes, el Papa Francisco, el
obispo Guillermo Vera, los que pasan hambre, quienes no tienen casa, entre
otras grandes respuestas efectuadas por todos los niños, quienes repetían junto a los otros
fieles “Escúchanos Señor, te rogamos”.
Tras el término de la ceremonia, se invitó a todos
los pequeños a que asistieran los días de fiesta al Santuario, para participar
de diversas actividades que realizan los Servidores de la Misión Niños, desde
las 16.00 a las 18.00 horas.