Un vídeo viral en el que se ve como dos
agentes golpean a un adulto mayor en la marcha feminista del pasado domingo ha
vuelto a abrir el debate sobre el uso excesivo de la fuerza por parte del
cuerpo policial y ha provocado críticas encendidas de la oposición y organismos
internacionales.
En las imágenes difundidas en las redes
sociales se aprecia como dos uniformados pegan con bastones retráctiles a un
hombre que yace en el suelo y que apenas opone resistencia en una calle aledaña
a Plaza Italia, el epicentro de la ola de protestas que vive el país desde
octubre y donde cientos de miles de personas se congregaron el domingo por el
Día Internacional de la Mujer.
Los agentes fueron increpados por
varias mujeres que trataron en vano de impedir la paliza contra el hombre, de
69 años y quien terminó con contusiones leves y varios puntos en la cabeza y en
la frente.
"Fue tan innecesaria la violencia
que cayó sobre mí. Carabineros impartió lumazos a diestra y siniestra, yo traté
de defenderme, pero fue imposible evitarlo", dijo la noche del lunes la
víctima, Patricio Bao, en una entrevista en el canal nacional 24 Horas.
"Carabineros actúa de forma desmedida. En estas situaciones se ciegan, no tienen un
criterio formal o alguien que les indique que está mal el procedimiento que
están empleando", agregó Bao, militante socialista desde hace años.
Investigaciones en curso
La Fiscalía ha abierto una
investigación de oficio para esclarecer los hechos, mientras que el cuerpo
policial defiende que Bao fue neutralizado porque minutos antes le propinó una
patada por la espalda a un agente, lo que presuntamente se aprecia en otro
video difundido por la propia institución.
"La persona que protagoniza el
vídeo viral fue detenida por desórdenes graves (...) Su detención fue decretada
legal por el Juzgado de Garantía e incluso se le decretaron medidas cautelares
de firma mensual y prohibición de acercarse al lugar", indicó a los medios
el jefe de Carabineros de la Zona Metropolitana Oeste, Enrique Monras.
El Gobierno del derechista Sebastián
Piñera guardó silencio hasta este martes, cuando el ministro del Interior,
Gonzalo Blumel, informó en rueda de prensa que ordenó a la institución abrir un
procedimiento interno para evaluar si se suspende del cargo a los agentes,
aunque reconoció que las imágenes demuestran que "hubo un uso excesivo de
la fuerza".
Repudio de oposición y organizaciones
de DD.HH
La agresión provocó un rechazo frontal
de la oposición, que pidió de nuevo al Gobierno reformar el cuerpo policial,
que se encuentra en el punto de mira desde el inicio de la crisis y ha sido
acusado por organismos internacionales como ONU, Amnistía Internacional (AI) o
Human Right Watch (HRW) de hacer un uso excesivo de la fuerza y cometer graves
violaciones a los derechos humanos en las marchas.
"Conozco a Patricio Bao desde hace
años, un hombre comprometido con un Chile más justo que fue brutalmente golpeado
por acompañar a su familia a la conmemoración del #8M. Nada justifica este
nivel de violencia y represión", denunció el presidente del Partido
Socialista (PS), Álvaro Elizalde.
"Esto no puede ser tolerado. Ya no
basta con dar de baja y sancionar a Carabineros participes de esta brutal
agresión, es la institución entera la que debe ser intervenida", añadió
por su parte el diputado izquierdista Gabriel Boric. .
También se pronunció en su cuenta de
Twitter el director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco, quien
calificó la agresión de "espectáculo grotesco de brutalidad policial"
y aseguró que es "imposible que Carabineros recupere legitimidad ciudadana
con conductas repugnantes como esta".
Chile vive su convulsión social más
grave desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), que empezó
el pasado octubre como un llamamiento de los estudiantes a colarse en el metro
de la capital para protestar contra el aumento de la tarifa y se convirtió en
una revuelta por un modelo económico más justo.
La crisis ya ha dejado más de una
treintena de muertos, miles de heridos y detenidos, además de episodios de
violencia extrema con incendios, saqueo y destrucción de mobiliario público.
Fuente: EFE