Latinoamérica fue la gran olvidada en el discurso sobre el Estado de la Unión que pronunció hoy el presidente de EE.UU., Barack Obama, ante ambas cámaras del Congreso.
A diferencia del año pasado, cuando durante ese mismo discurso Obama anunció la gira por Brasil, Chile y El Salvador que realizó en marzo, esta vez dedicó tiempo a hablar de Irán, la "primavera árabe" y otros asuntos de política internacional, pero no de Latinoamérica.
Únicamente hizo una breve mención a los Tratados de Libre Comercio (TLC) con Panamá y Colombia, que entraron en vigor en 2011 después de años estancados en el Congreso estadounidense.
"Pronto habrá miles de nuevos consumidores para los productos estadounidenses en Panamá, Colombia y Corea del Sur", dijo Obama al respecto.
La gira que realizó Obama en marzo pasado por Brasil, Chile y El Salvador fue su primera visita a Suramérica.
En 2009 el presidente estadounidense se desplazó en dos ocasiones a México y participó en la Cumbre de las Américas en Trinidad y Tobago, donde anunció una "renovada relación" con América Latina que para algunos analistas todavía no se ha concretado ni ha dado frutos.
Obama tiene previsto viajar en abril a Cartagena de Indias (Colombia) para participar en la próxima Cumbre de las Américas.