El
Gobierno chileno anunció hoy que desde el próximo jueves comenzará a enviar un
total de 1.200 viviendas de emergencia a los afectados por el temporal que la
semana pasada dejó 18 fallecidos, 49 desaparecidos y 27.413 damnificados en el
norte del país.
"Se
trata de viviendas de emergencia, pero de alto estándar con una superficie de
24 metros cuadrados y con baño individual", señaló la presidenta Michelle
Bachelet durante una visita a la fábrica que construye las viviendas.
Bachelet
advirtió que no se instalarán en lugares donde las viviendas fueron arrasadas,
sino que buscarán zonas más seguras, "pero también cerca de donde ellos
(los damnificados) vivían, de manera de no trastocar demasiado sus vidas".
Según
el último balance de las autoridades, en la región de Antofagasta hubo 871
viviendas con daño mayor y 71 destruidas; en la región de Atacama se reportan
5.000 viviendas con daño mayor y 180 destruidas, y en la región de Coquimbo hay
33 casas con daño mayor.
En
tanto, del total de damnificados, 3.490 corresponden a personas que se
encuentran en condición de albergados en los 32 refugios habilitados en la
zona.
En
la inspección a la fábrica, Bachelet también enfatizó en que las viviendas de
emergencia "han aumentado en 6 metros cuadrados su superficie y vienen con
terminaciones incorporadas, un sistema de termopanel e incorpora muros
pintados, sistema eléctrico y sistema de aislamiento".
"Este
tipo de viviendas surge también de la experiencia de lo que hemos aprendido de
otros desastres anteriores", señaló por su parte el ministro del Interior,
Rodrigo Peñailillo, quien también participó de esta inspección.
"No
vamos a cesar en las labores de rescate", subrayó la mandataria chilena,
que insistió en que "no los estamos dejando solos (a los damnificados),
estamos trabajando para llegar a apoyarlos también en este aspecto".
Las
primeras 30 casas serán transportadas este jueves a la localidad de Tierra
Amarilla, en terrenos de una minera y del Ministerio de Bienes Nacionales. Las
viviendas serán instaladas por las Fuerzas Armadas y voluntarios, coordinados
por la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi).
Fuente:
EFE