Un
gigantesco incendio forestal seguía amenazando a la ciudad chilena de
Valparaíso, declarada en estado de emergencia y donde se esperaban para las
próximas horas “desfavorables” condiciones atmosféricas para la extinción de
las llamas.
Durante
la madrugada, sin embargo, brigadistas lograron contener el avance del fuego
declarado la víspera en esta localidad portuaria y que hasta el momento se
cobró una vida.
“El incendio
está contenido, pero no controlado”, dijo Ricardo Toro, director de la Oficina
Nacional de Emergencias (Onemi), en un último reporte en Santiago.
Después
de que por la noche ardieran unas 460 hectáreas de pastizales y bosques, de
acuerdo con el último reporte oficial, de mañana no se veían mayores llamas en
las distintas quebradas donde trabajaban los bomberos.
“Estuvimos
a cinco minutos de que se nos quemara el departamento; entonces fue terrible,
porque la gente perdió el control, y un caos, no había luz, colapsaron las
calles, todo imprevisto”, dijo a la AFP, Juan Salmora, habitante del poblado
Santa Teresita, uno de los lugares donde el fuego estuvo más cerca de las zonas
habitadas.
En el
centro de Valparaíso la situación era normal, sólo interrumpida por el vuelo de
aviones aljibes y helicópteros que participan en las labores de extinción del
fuego en la parte alta de la ciudad, constató un periodista de la AFP.
En la
ciudad corría una pequeña brisa que arrastraba algunas cenizas pero no de la
magnitud de las que cayeron durante el incendio que azotó a la misma zona en
2014, y que se cobró la vida de 15 personas y arrasó 3.000 viviendas.
El
gigantesco incendio se inició la tarde del viernes, aparentemente en un basural
en la parte alta de Valparaíso, un pintoresco enclave ubicado a unos 120 km al
oeste de Santiago y visitado por miles de turistas, que admiran las coloridas
viviendas que se levantan en sus cerca de 40 cerros.
Una mujer
de 67 años que murió en un hospital de la ciudad a causa de un paro cardiaco es
hasta ahora la única víctima de este siniestro, mientras que 15 bomberos
resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, y otros seis civiles
lesionados. Para las próximas horas, sin embargo, los pronósticos
meteorológicos no son los más favorables para el combate de las llamas, con una
temperatura que podría llegar a los 27 grados y vientos de unos 30 km/h.
Una evacuación tranquila
Durante
la noche, unas 7.000 personas fueron evacuadas. La gran mayoría había vuelto ya
a sus hogares. Solo una veintena permanecía en el único albergue que se
mantenía en funciones, de acuerdo con la Onemi.
“Empezó
el incendio acá, y empezó el calor, y de allí ya el humo, era imposible estar.
Por eso no pudimos sacar nada. Nos echaron prácticamente, no nos dejaron estar
acá”, dijo a la AFP, Silvia Nolan, una de las evacuadas.
No se
reportaron asaltos o robos producto del operativo, ni tampoco se reportaban
viviendas afectadas debido al incendio.
Por
precaución, tanto el puerto de Valparaíso como la vecina ciudad de Viña del Mar
se mantenían en estado de emergencia, lo que implica que las fuerzas de orden
están a cargo del Ejército.
“En este
momento, la situación es de tranquilidad. No tenemos información de riesgo
inminente sobre zonas pobladas”, declaró Ronald Mcintyre, un alto militar a
cargo de la seguridad en ambas localidades.
Un año después se revive
la tragedia
Al igual
que el año pasado, gigantescas llaman amenazaron las zonas más altas de
Valparaíso, avivadas por las altas temperaturas del verano austral y fuertes
vientos, en una zona de difícil acceso alrededor de una importante vía conocida
como “Camino La Pólvora”.
Considerado
el peor incendio en la historia de Valparaíso, el siniestro del 12 de abril de
2014 causó la muerte de 15 personas, más de 12,000 afectados y unas 3,000
viviendas destruidas.
Tras ocho
días, el incendio logró ser controlado, pero hasta el día de hoy continúan las
labores de reconstrucción de las zonas afectadas.
“Esta
situación asusta a la población, aún está vivo el temor del recuerdo del
incendio del año pasado”, dijo Jorge Castro, alcalde de Valparaíso, a medios
locales.
Tal como
en 2014, varias compañías de Bomberos, brigadistas, aviones y helicópteros
trabajaban en el combate del incendio, que en su momento de mayor complejidad
desprendió una inmensa columna de humo que llegó hasta la bahía de Valparaíso.
Valparaíso,
uno de los puertos más importantes de Chile, tiene unos 260.000 habitantes, en
su mayoría pobres que viven en pequeñas casas de latas y madera que cuelgan de
los cerros, de muy difícil acceso.
Los
incendios en Chile durante el verano son habituales y la mayoría de ellos son
provocados por intervención humana.
Fuente:
AFP