El fiscal nacional, Jorge Abbott, firmó
hoy un oficio dirigido al Vaticano para solicitar los expedientes canónicos que
involucran a clérigos investigados por el Ministerio Público en casos de abusos
sexuales cometidos por sacerdotes y laicos relacionados con la Iglesia católica
del país austral.
El oficio, con carácter de reservado,
fue enviado durante esta jornada por la Unidad de Cooperación Internacional y
Extradiciones (UCIEX) de la Fiscalía Nacional al Ministerio de Relaciones
Exteriores de Chile, a fin de que la Cancillería active el mecanismo de
remisión a través de la vía diplomática al Vaticano.
La solicitud de la Fiscalía Nacional
aúna tres requerimientos de asistencia internacional en materia penal respecto
de nueve personas investigadas por las Fiscalías Regionales de Valparaíso, a
120 kilómetros al noroeste de la capital chilena, metropolitana sur de Santiago
y de La Araucanía.
El Ministerio Público explicó a la
prensa que la base jurídica de la solicitud se asienta en los principios
generales del derecho internacional, en particular en el de reciprocidad, marco
en el que le corresponde a Cancillería ejercer el rol de autoridad central en
materia de requerimientos a otros Estados.
El director de Cooperación
Internacional de la Fiscalía Nacional, Antonio Segovia, explicó hoy que este
pedido tiene relación con las 37 investigaciones que actualmente están vigentes
en investigación contra personas relacionadas con el clero chileno.
"Se está solicitando diversos
antecedentes y diversa información que está en poder del Estado del Vaticano y
de la Santa Sede para que puedan ser allegadas a la investigación como
antecedentes que permitan continuar la misma aquí en Chile", dijo Segovia.
Asimismo, destacó que este pedido solo
se limita a casos de tres fiscalías regionales y que todavía podrían realizarse
peticiones de este tipo sobre casos investigados con otras oficinas regionales
del Ministerio Público.
Además agregó que entre los que forman
parte de esta petición actual se encuentra el conocido como "informe
Scicluna".
El pasado 18 de julio, la Fiscalía
chilena ya había confirmado la preparación de un exhorto dirigido al Vaticano
para obtener el informe que elaboró el arzobispo Charles Scicluna, enviado del
papa Francisco a Chile, sobre casos de abuso sexual cometidos por miembros de
la Iglesia católica en el país austral.
Scicluna, quien visitó dos veces Chile
junto al jesuita español Jordi Bertomeu, oficial de la Congregación para la
Doctrina de la Fe, recogió los testimonios de 64 presuntas víctimas y entregó
al papa un informe de 2.300 páginas.
Tras el envío de estos tres primeros
requerimientos de información, la Fiscalía no descarta presentar nuevas
solicitudes al Vaticano.
El Ministerio Público investiga a 158
personas relacionadas con la Iglesia católica en el marco de 144 casos de
abusos sexuales o de otro tipo contra 266 víctimas en Chile.
La Iglesia chilena está desde hace
tiempo sumida en una crisis por escándalos de abusos sexuales, que el papa
consideró calumnias hasta su visita al país el pasado enero, tras la cual
decidió enviar a Scicluna y emprendió varios cambios en la jerarquía católica
local.
Hasta ahora, el pontífice ha aceptado
las renuncias de cinco obispos, algunos de ellos acusados de encubrir abusos,
mientras han surgido nuevas denuncias, como las que apuntan a religiosos
marianistas y a un excanciller del arzobispado de Santiago, Óscar Muñoz, que
está en prisión preventiva.
Fuente: EFE