
El presidente de
Chile, Sebastián Piñera, aceptó hoy la renuncia del ministro de Cultura,
Mauricio Rojas, tras la polémica que provocó con sus críticas hace tres años al
Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, del que dijo que era un
"montaje" que manipulaba la historia.
"Pensando solo
en el mejor interés de nuestro país, en el bienestar de todos nuestros
compatriotas y en la buena marcha de nuestro Gobierno, he decidido aceptar su
renuncia", dijo en una comparecencia Piñera, que designó a Rojas recién el
jueves de la semana pasada en el primer ajuste de su gabinete de ministros.
Tras su nombramiento,
el diario "La Tercera" replicó el sábado pasado unas palabras de
Rojas en una conversación con el actual canciller, Roberto Ampuero, que
aparecieron en el libro "Diálogo de Conversos", que ambos publicaron
en 2015.
Rojas declaró en el
libro que el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, inaugurado en 2010 por
la entonces presidenta, Michelle Bachelet, y que promueve el recuerdo de los
crímenes cometidos durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), es
"un montaje cuyo propósito es impactar al espectador, dejarlo atónito,
impedirle razonar".
"Es una
manipulación de la historia", añadió Rojas, que en su juventud militó en
movimientos de la izquierda antipinochetista y se exilió en Suecia, donde fue
parlamentario.
En 2016, en una
entrevista con CNN, el ahora exministro reafirmó su opinión y dijo que el museo
buscaba "contar una versión falsa de la historia de Chile (...), es algo
para que la gente no piense, para atontarte".
Piñera afirmó este
lunes que el Gobierno no comparte las "apreciaciones" realizadas en
el pasado por Rojas sobre el Museo de la Memoria, aunque recordó que el propio
afectado subrayó el sábado pasado que ya no reflejaban su pensamiento actual y
destacó su "permanente y consecuente posición de condena" de las
violaciones de los derechos humanos.
Los partidos
opositores de izquierda y organizaciones del ámbito artístico, cultural y de
los derechos humanos pidieron su salida del Gobierno desde que se difundieron
sus declaraciones de 2015 y 2016.
En ese sentido,
Piñera criticó hoy la intención de "ciertos sectores" del país que
"pretenden imponer una verdad única y que no tienen ninguna tolerancia ni
respeto por la libertad de expresión y de opinión de nuestros
compatriotas".
"Sin perjuicio
de condenar categóricamente los lamentables, graves e inaceptables atropellos a
los derechos humanos (...), es bueno preguntarnos con la misma libertad y
analizar con objetividad, profundidad y con buena fe por qué se debilitó la
democracia y el Estado de derecho en nuestro país", señaló.
El mandatario
enfatizó que su Gobierno condena las violaciones de los derechos humanos que
ocurrieron en Chile durante la dictadura y las que "ocurren hoy día en
muchos países del mundo, incluyendo algunos de nuestro propio continente, como
Cuba, Venezuela y Nicaragua".
Piñera anunció que la
nueva ministra de Cultura será la arqueóloga Consuelo Valdés, que actualmente
es la secretaria ejecutiva del Museo Interactivo Mirador.
Fuente: EFE