jueves, 30 de junio de 2011

Rectores entregan declaración por rechazo a propuesta del Mineduc

En punto muerto quedaron las negociaciones entre el ministerio de Educación y el Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas el miércoles, luego que las máximas autoridades de los planteles tradicionales rechazaran la nueva propuesta enviada por Joaquín Lavín.

La reacción desde el Gobierno fue airada, responsabilizando a los rectores de la falta de acuerdo y, en especial, a Víctor Pérez de la Universidad de Chile por la decisión tomada.

Incluso, un vespertino consignó que uno de los ministros señaló que el rector Pérez estaba confundiendo una negociación universitaria con una comercial y estaba descuidando el aspecto académico al permitir que los estudiantes estuvieran en paro.

Mientas unas cuatrocientas mil personas se manifestaban en todo Chile por la recuperación de la educación pública, el jueves, el CRUCH sostuvo su sesión habitual en la que redactaron una declaración pública explicando a la ciudadanía las razones por las que todos los rectores optaron por rechazar la propuesta del Gobierno que consideran “insuficiente”.

“El Consejo de Rectores lamenta que el ministro de Educación estime que esta decisión fue motivada por las marchas de los estudiantes y académicos. Las razones del Consejo de Rectores están asociadas a los problemas de fondo de la Educación Superior del país”, afirmaron.

Las autoridades universitarias explicaron que la segunda propuesta entregada por Lavín “es diferente en alcance y contenido al que se venía trabajando entre el Consejo de Rectores y el Ministro de Educación”.

El documento emanado del CRUCH detalla las omisiones en las ofertas del Gobierno que hacen imposible su aprobación, como el incumplimiento del compromiso adquirido de que la inversión pública en educación alcance al menos el promedio de los países de la OCDE.

“No se avanza en transparencia con una ley que regule el lobby. No se avanza en fiscalización con una Superintendencia de Educación Superior que haga transparencia y haga cumplir la ley”, afirman los rectores.

Asimismo, destacan que “no se avanza en mayores aportes basales a las Universidades del Consejo de Rectores para financiar sus proyectos institucionales y de bien público” ni tampoco “se aumenta el tipo y monto de ayudas estudiantiles para dar equidad e igualdad de oportunidades a los estudiantes vulnerables y de la clase media”.

Por su parte, el ministro Joaquín Lavín ha insistido en que existía un acuerdo previo con los miembros del CRUCH, pese a las declaraciones del rector Víctor Pérez sobre las deficiencias de sus propuestas y a la inasistencia del titular de Educación a la reunión con el organismo académico el miércoles en la tarde.

A este traspié se le suman a Lavín las críticas que han surgido al interior de la propia Alianza por su desempeño, específicamente de parte del secretario general de Renovación Nacional, Mario Desbordes. Aunque desde la UDI y el propio gabinete se apresuraron en respaldar su labor como ministro.

En el frente estudiantil, en tanto, Camila Vallejos, presidenta de la FECH, lo descartó como un interlocutor válido y lo emplazó a tomar vacaciones, tal como las que decretó para los colegios en toma, pero para siempre.