Poco más de 72 horas alcanzó a ocupar el cargo de ministro de Energía Fernando Echeverría, nombrado en relevo de Laurence Golborne en el último cambio de gabinete realizado el lunes por el Presidente, Sebastián Piñera.
El ex intendente metropolitano y empresario, sostuvo que su participación en los directorios de varias compañías hacía incompatible su trabajo al frente de la secretaría de Estado en la que había sido recientemente nombrado.
“Al analizar la declaración descubrí que no había ninguna dificultad legal para ejercer el cargo de ministro de Energía, pero me di cuenta que había intereses de las empresas que yo represento que podrían interpretarse el día de mañana en contra del gobierno y en contra mía”, dijo Echeverría.
Esta no es la primera vez en que el empresario ha sido cuestionado por sus incompatibilidades para desempeñarse en cargos públicos. Cuando asumió como intendente fue altamente criticado por su participación en la constructora Echeverría Izquierdo, una de las más importantes en la región Metropolitana.
Y las reacciones a la renuncia no se hicieron esperar. El vicepresidente del Partido Socialista, diputado Marcelo Díaz, sostuvo durante un programa radial, que se debe valorar el gesto antes de esperar caer en un conflicto de interés y provocar un conflicto mayor.
“Parte importante del desgaste que tiene Piñera en las encuestas tiene que ver con que la ciudadanía entendió que este es un Gobierno al que no le importaban los conflictos de interés, que sólo los atendía cuando estallaban y que más que una administración tecnócrata es de empresarios. Fernando Echeverría es un ex Presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, uno de los rubros más millonarios del país.
Valoremos el gesto que da cuenta de la impericia de este Gobierno que ni siquiera puede hacer una revisión de antecedentes antes de nombrar a un ministro de Estado”, sentenció el parlamentario.
Mientras, la directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, lamentó que el Ejecutivo esté cayendo en este nivel de improvisación, lo que demuestra además que no se está colocando a la gente idónea en los cargos.
“Creemos que da una pésima imagen especialmente en un sector que es crítico porque junto con educación es donde han estado centradas las movilizaciones y protestas ciudadanas. El país tiene los dos megaproyectos aprobados en los últimos meses, Castilla en la región de Atacama e Hidroaysén en la Patagonia y ambos están paralizados en los tribunales de justicia porque al Gobierno no le dio el ancho para aplicar la legislación”, sostuvo la ambientalista.
Este es el tercer personero que ocupa el Ministerio de Energía. El primero fue Ricardo Raineri quien fue relevado por Laurence Golborne, el cual salió del cargo el lunes para asumir en Obras Públicas y reemplazado por el ahora renunciado Felipe Echeverría.
