lunes, 31 de julio de 2017

Chile: Confirman dos casos de lepra importada

La enfermedad afecta principalmente a la piel. Su incubación puede tardar de cinco a 20 años. Es contagiosa.

La ministra de salud de Chile informó el lunes que se han registrado dos casos de lepra en dicho país y que un tercero está a la espera de confirmación. Señaló también que todos los pacientes se encuentran bajo tratamiento.

“Estamos hablando de casos importados y que en este momento están absolutamente controlados”, dijo a periodistas la ministra Carmen Castillo. Añadió que un tercer paciente con diagnóstico no definido "inició también su terapia, por lo tanto, si llegara a confirmarse, estaría también siendo controlado”.

La lepra es una enfermedad crónica causada por un bacilo que se reproduce muy lentamente, por lo que la incubación de la enfermedad puede tardar de cinco a 20 años, aunque los síntomas suelen aparecer en el primer año. Es contagiosa, aunque de baja transmisibilidad, y tiene tratamiento con múltiples medicamentos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La enfermedad afecta principalmente la piel y se transmite por gotas nasales y orales cuando hay contacto con enfermos no tratados.

Castillo se refugió en los derechos de los pacientes para no dar más detalles, pero el jefe de salud regional de Valdivia, el doctor Patricio Rosas, indicó que en el caso registrado en esa región del sur de Chile, el paciente es de origen haitiano. El hombre acudió a una consulta médica por una lesión en la piel, y ante la sospecha del mal se iniciaron de inmediato los exámenes y el tratamiento.

Según la OMS, en los últimos 20 años se han tratado unos 16 millones de enfermos en el mundo y su tasa de morbilidad ha bajado notoriamente: de 5,2 millones de casos en 1985 a 176.176 a fines del 2015.

En el pasado, Chile tuvo muchos casos en la Isla de Pascua, 3.500 kilómetros al oeste del continente. Se cree que la enfermedad había llegado a fines del siglo XIX procedente de Haití.

Los enfermos, que llegaban a perder piel y trozos de dedos entre otras consecuencias, eran discriminados y aislados en leprosarios para mantenerlos apartados de la sociedad. En 1992 quedaban tres leprosos que fueron dados de alta y reintegrados a sus familias.


Fuente: AP