martes, 5 de julio de 2011

Aprobación de Piñera baja al 35 por ciento

La aprobación del presidente chileno, Sebastián Piñera, pasó del 47 % en diciembre al 35 % el pasado mayo, el nivel más bajo alcanzado por un mandatario de ese país desde el retorno a la democracia, en 1990, según una encuesta difundida hoy.

El sondeo, del Centro de Estudios de la Realidad Contemporánea (CERC), muestra además que su desaprobación ascendió del 41 al 53 % y también supera las registradas por los cuatro ex presidentes de la Concertación (1990-2010).

Un año después de asumir el poder en marzo de 2010, tras ganar las elecciones con un 51,61 % de los votos, solo el 28 % de los ciudadanos dice tener una buena opinión de Piñera y más de la mitad (57 %) dice creerle poco o nada.

Esta encuesta se aproxima al último sondeo de Adimark, que cifró la aprobación en mayo en un 36 % y la desaprobación en un 56 %.

Su baja popularidad contrasta con el buen escenario macroeconómico, con tasas de crecimiento superiores al 6 % y una tasa de desempleo del 7,2 % y, según el CERC, está vinculada con la desigualdad y la frustración de las expectativas puestas en él.

Porque, pese a esa pujante expansión, el 83 % cree que los ricos aún son más ricos y que no se están disminuyendo las profundas brechas sociales, y un 65 % cree que el crecimiento no le ha beneficiado en nada.

Ese malestar se ha trasladado a la calle, con masivas protestas de estudiantes, que piden más implicación del Estado en la educación.

"Hay una explosión de demandas, por la conciencia de la debilidad de la educación superior y por las expectativas que la autoridad pone en ella. Eso va cruzado por una percepción de las desigualdades", explicó el director del CERC, Carlos Huneeus.

A ello se suma "un gobierno que tiene un problema de identidad, porque planteó un cambio", pero no ha podido diferenciarse de los anteriores, ya que estos "fueron poco explícitos en impulsar una política económica distinta" a la heredada de la dictadura.

De hecho, un 71 % de los encuestados ve pocos o ningún cambio.

La diferencia, según Huneeus, es que "los gobiernos de la Concertación podrán haber seguido políticas económicas conservadoras, pero representaban sectores sociales diferentes".

En cambio, Piñera y sus ministros representan a "una parte del país que ha tenido una mayor participación en los beneficios del crecimiento", dice Huneeus.

Según la encuesta, un 64 % coincide en que este es "un gobierno de los empresarios".

De cara al futuro, el 35 % de los chilenos piensa que la ex mandataria Michelle Bachelet, que dejó el poder con un histórico nivel de aprobación superior al 80 %, será la próxima presidenta del país, mientras que un 42 % no sabe o no contesta.

Otro ocho por ciento cita al actual ministro de Minería y Energía, Laurence Golborne, que ganó popularidad durante el rescate de los 33 mineros de Atacama y es la figura de la coalición gubernamental mejor situada en esa carrera (38 %).

Piñera, como ocurrió en 2009 con Bachelet, no podrá participar en ella, ya que en Chile no se puede optar a un segundo mandato consecutivo.

Golborne se ha encontrado con masivas manifestaciones contra la construcción de HidroAysén, que contempla la construcción de cinco represas en la Patagonia, a las que se opone un 62 % de los encuestados.

Por detrás de Golborne se sitúa el ministro de Educación, Joaquín Lavín, que ya se postuló en dos ocasiones como candidato y que ha tenido que enfrentar las marchas de los estudiantes, aunque sólo el tres por ciento cree que vaya a suceder a Piñera.

La encuesta se realizó entre el 7 y el 14 de mayo a través de entrevistas a 1.200 personas mayores de 18 años, que representan al 99 % de la población del país, y tiene un margen de error del tres por ciento.