En todos los casos viajaban como pasajeros en buses interprovinciales con
destino a Antofagasta, La Serena y Santiago.
Fiscalizadores del Servicio Nacional de
Aduanas sorprendieron a ocho personas con droga en las avanzadas El Loa y
Quillagua. En total portaban 17 kilos 131 gramos de distintas drogas con un
valor que supera los $181 millones en el comercio ilícito.
El primer
procedimiento se registró en la avanzada El Loa a las 16.20 horas cuando los
aduaneros controlaron a los pasajeros de un bus que viajaba desde Arica a La
Serena.
En dicho contexto
sorprendieron con droga a la dueña de casa, M.P.A.C. de 21 años de edad, y a su
amiga M.S.D. de 24 años edad. Cada una de ellas llevaba 89 ovoides de cocaína
ocultos al interior de sus sostenes y zapatos, los que sumaron un total de 2
kilos 155 gramos de clorhidrato de cocaína alta pureza. Las dos vivían en
Cochabamba, Bolivia, y abordaron el bus en Iquique.
Posteriormente y
en el mismo control, a las 01.20 de la madrugada, se interceptó a la ciudadana
colombiana R.A.G.S., de 21 años de edad, quien llevaba 3 paquetes adheridos a
su zona lumbar con un total de 1 kilo 353,5 gramos de marihuana. Ella viajaba
en un bus con destino a Antofagasta, ciudad en la que reside hace un mes.En
tanto, a las 02.15 de la madruga en la avanzada de Quillagua los aduaneros
detectaron a cuatro mujeres, dos colombianas y dos peruanas, que viajaban con
droga oculta entre sus cuerpos y prendas de vestir. Todas iban como
pasajeras de un bus que salió desde Arica con destino Santiago. La asistente de
ancianos L.P.M. (35) transportaba 8 paquetes con 5 kilos 119 gramos de
marihuana, mientras que la técnico en enfermería L.P.M. (25) tenía 7 paquetes
con un total de 4 kilos 39 gramos de marihuana. En tanto, las comerciantes
tacneñas y primas M.S.E. (25) y L.C.E. (28) portaban cuatro paquetes con un
total de 3 kilos 218 gramos de clorhidrato de cocaína.
El último
procedimiento fue a las 6 de la mañana en Loa y lo protagonizó el agricultor
boliviano E.M.S. de 36 años de edad, quien ocultaba cuatro paquetes con un
total de 1 kilo 428,5 gramos de pasta base de cocaína. La droga estaba inserta
como plantilla en dos pares de zapatos, uno de los cuales lo calzaba el
cochabambino.