Un
fuerte terremoto de magnitud 7,6 estremeció el sur de Chile el domingo sin que
haya reportes de personas heridas o muertas. La Armada de Chile activó pero
posteriormente canceló un alerta de tsunami.
El
temblor se sintió en regiones aledañas, incluso ciudades y pueblos argentinos.
Las autoridades esperan nuevas réplicas.
El
Servicio Geológico de Estados Unidos corrigió en un tercer informe los datos
preliminares y estableció el epicentro a 39 kilómetros el suroeste del puerto
de Quellón, y a una profundidad de 34,6 kilómetros, en la isla de Chiloé, que
se encuentra a unos 1.300 kilómetros al sur de Santiago. El terremoto se
produjo a las 11:22 horas locales (14:22 GMT).
"No
hay afectación de vidas humanas", afirmó en su último informe Ricardo
Toro, director general de la Oficina Nacional de Emergencias, ONEMI. Según
informó Toro no hay todavía informes de daños materiales, pero esa información
se está evaluando en estos momentos y se confirmará cuando se sepa con más
seguridad.
"Algún
daño debe haber pero queremos ser muy precisos", explicó.
El
Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile determinó la
evacuación inmediata para la isla Grande de Chiloé y alerta de tsunami para la
región costera de Los Lagos inicialmente, pero posteriormente rebajó esta
alerta al estado de precaución en zonas del sur donde se recomendó a la
población abandonar las zonas de playa y mantenerse alerta.
Además
se canceló el estado de precaución para la región del Bio Bío, más en el centro
sur del país.
La
ONEMI reporta que en la región de Los Lagos, la más afectada, ya han evacuado
unas 4.000 personas. Las evacuaciones se realizaron de forma pacífica y
calmada, según mostraron las imágenes de televisión.
La
zona de Melinka, próxima al epicentro y dónde se esperaban inicialmente las
primeras olas de tsunami se mantenía tranquila. "No se ha percibido un
aumento de oleaje en la zona", reportó el capitán de comunicaciones de la
policía Oscar Llantén a medios locales. "Hay unas 2.000 personas en el
estadio y dos médicos, la gente está ya más tranquila", afirmó.
"¡Mucha
fuerza y ánimo a los compatriotas afectados por el sismo en Chiloé y otras
zonas del sur! Protocolos de emergencia ya están operando", afirmó via
Twitter la presidenta del país, Michelle Bachelet.
Según
los informes de testigos en canales de televisión se trató de un temblor muy
largo e intenso. En las redes circulan fotos de daños fuertes en algunas
carreteras.
La
comunicación resulta difícil en muchas partes afectadas y se trata de un área
de terrenos esparcidos y aislados donde no es fácil la tarea de recabar
información.
La
empresa eléctrica Saesa informaba de 22.000 personas sin suministro eléctrico y
en algunas zonas no hay tampoco comunicación telefónica.
"Yo
estaba lavando el auto y empezó, fue muy fuerte, tengo 48 años y nunca había
sentido algo tan fuerte", explico a la AP Luis Ramírez, taxista de la
población de Ancud.
"La
gente que vive en la parte baja del mar evacuó toda", relató. "Acá
andan vehículos con balizas y parlantes avisando".
La
aerolínea Sky informa que mantendrá los horarios de sus vuelos al sur, puesto
que los terminales están abiertos.
Para
Sergio Barrientos, director del Centro Sismiológico Nacional de la Universidad
de Chile, el terremoto podría haberse originado por el desplazamiento de unos
dos metros de la placa de Nazca por debajo de la Sudamericana. Ambas placas se
encuentran en contacto en el llamado cinturón del Pacífico, que incluye a Chile.
Chile
es uno de los países más sísmicos del mundo y su población sabe que si los
terremotos son en el mar o en sus cercanías debe evacuar a zonas por arriba de
los 30 metros. Ese conocimiento popular salvó la vida a miles de personas en el
megaterremoto en Concepción en el 2010, de 8,8 de magnitud, cuando murieron
poco más de 500 personas.
En
2014 y 2015 hubo otros dos terremotos de 8,2 y 8,4 en el norte.
Fuente: AP