viernes, 9 de abril de 2010

Consejeros regionales preocupados del mal estado de calles y calzadas

Una ciudad que se enfoque hacia el turismo y el desarrollo no puede presentar tantas deficiencias en sus calles y calzadas, las que están con serios problemas, a raíz de los innumerables hoyos y desniveles que presentan en la actualidad. Y eso repercute en forma muy fuerte y directa en la población de Iquique.

El comentario anterior apegado a la más cruda realidad es una de las principales preocupaciones que tiene el gobierno regional, en especial de parte del Consejo Regional de Tarapacá, según sostuvo el consejero Julio Cámara Cortés.

La autoridad regional agregó que esta situación afecta a la mitad de los iquiqueños y “al parecer no tiene una verdadera solución” a menos que se hagan cambios significativos desde la autoridad central. “Esta situación es, además, tema recurrente en las secciones Cartas al Director de la prensa local”, dijo.

Cámara dijo que estos hoyos y/o “eventos” en las calles de Iquique son tan grandes que parecen “mega eventos” y ponen en riesgo la seguridad de conductores de vehículos particulares y de transporte de pasajeros.

Manifestó que esta situación puede tener un arreglo integral y permanente, ya que el Gobierno Regional de Tarapacá puede destinar “como lo ha hecho en otras ocasiones” recursos para la reparación y conservación de las vías urbanas.

Divorcio entre Gobierno Central y Regional

Según el consejero este tema está en la normativa vigente y en los procedimientos contradictorios para enfrentar el problema porque existe un organismo como es el Serviu con experiencia y capacidad técnica para hacerse cargo del tema, pero ocurre que la ley delegó en los gobiernos regionales la responsabilidad del mantenimiento de las calles y calzadas.

“Entiendo – argumentó – que a fines del gobierno de Ricardo Lagos, y mediante decreto presidencial y sin consultar a los gobiernos regionales se traspasó esta competencia a dichos gobiernos, lo que burocratiza enormemente encarar una situación que requiere eficiencia y oportunidad”.

Recordó que en Arica el municipio decidió tomar “el toro por las astas” para enfrentar el problema y adquirió una maquina “bacheadora” que permitiera tapar y reparar los hoyos oportunamente. Sin embargo, tal medida le significó un conflicto de competencias con el Gore y el Serviu, no obstante que parecía una vía expedita para dar solución más permanente a dicho problema.

“¿Qué se requiere entonces? A mi juicio que la autoridad central modifique dicho decreto y asigne a la entidad que corresponde tal tarea, no importa que el Gore siga aportando los recursos, o bien, que se le otorguen atribuciones y recursos a los municipios para que ellos asuman este trabajo, al menos, en lo que se refiere a la reparación de las vías, dejando la conservación (que es un tema mayor) en manos del Serviu. En conclusión, terminar con el diario sufrimiento de miles de iquiqueños requiere solamente un poco de decisión y voluntad política, y una buena coordinación entre las entidades que debieran hacerse cargo del tema, concluyó.