jueves, 21 de junio de 2018

Funcionarios de Bienes Nacionales dieron la bienvenida al año nuevo indígena con ceremonia de Machaq Mara


Una ceremonia de Machaq Mara se efectuó ayer en las afueras de la Seremi de Bienes de Tarapacá, ubicada en calle Aníbal Pinto 391, para dar la bienvenida  al Año Nuevo Indígena, una fecha llena de significado para la región, donde un 25% de la población se declaró como perteneciente a algún pueblo originario durante el último Censo de 2017.

En el marco del inicio del solsticio de invierno, que es pilar de la cosmovisión andina para organizar el año agrícola, la Unidad de Pueblos Indígenas organizó esta actividad, que en el caso de esta secretaría regional ministerial, se realiza hace tres años.

La seremi Pilar Barrientos, se sumó a la ceremonia y ofreció una rogativa por el bienestar del equipo de esta repartición. “Ha sido muy significativo participar de este nuevo año indígena, solicitando bendiciones a la Pachamama, al tata Inti, para todos nuestros funcionarios, para sus familias, para que nuestras autoridades tengan las bendiciones en este nuevo año para trabajar como corresponde para las personas”, señaló la autoridad.

Miguel Caqueo, coordinador zonal de la Unidad de Pueblos Indígenas-que funciona a través de un convenio entre Conadi y el Ministerio de Bienes Nacionales- encabezó esta ceremonia andina donde se presentaron diversas ofrendas a la Pachamama, como frutas y verduras de la zona y hoja de coca.

“Estamos en una región que se reconoce con una alta presencia de pueblos originarios, especialmente aymaras, quechuas y hoy día con bastante presencia del pueblo mapuche y segundo porque somos quienes administramos el bien fiscal, traducido a terreno, que está sobre la tierra… hay una relación directa donde hay una dualidad de la salida de sol el tata Inti y la Madre Tierra, para que esta tierra se enriquezca”,  resaltó Caqueo.

A la actividad que celebraron otros pueblos originarios del país, se sumaron usuarios y trabajadores de otros servicios y empresas colindantes, que se unieron en oración para que este nuevo ciclo está cargado de abundancia.